La coqueta y
juguetona Venus en Géminis, apenas comienza su recorrido por el signo de los
Gemelos. Feliz como una lombriz, sin preocupaciones, sin compromisos,
racionaliza todo lo que intente tratar de aproximársele a la palabra
sentimientos.
En su trayecto la
gracia juvenil se encuentra con la severidad de Saturno en Sagitario, es un
encuentro poco grato si se quiere para Venus, que anda pensando en pajaritos
preñados, en buscar placeres intelectuales y sociales que le brinden
satisfacción; motivada solo en estos momentos de flirtear o utilizar el
razonamiento antes que la seducción. Por su parte Saturno en Sagitario no le
gusta sentirse haragán o improductivo, para él el compromiso y la responsabilidad
están en primer lugar: le corta las alas a la mariposa?, pues si…, coacciona la
capacidad de la dama serena, para
disfrutar los placeres, intenta
regular la frecuencia para gratificarse impulsándola
a regañadientes a refrenar su apetito y a tomar una ruta más moderada, es la sequía
afectiva aunque en géminis es menos notorio por tratarse de un signo de aire,
la capacidad de disfrute es mermada notablemente. Cronos carece de sentimentalismos, a cambio solo le podrá
ofrecer estabilidad, mesura, experiencia, está dispuesta una energía tan
independiente a someterse a la rigidez del Dios del Tiempo?, por estatus o
interés a lo mejor, pero y el amor?, justamente esa es una de las pruebas de
este contacto, equilibrar y encontrar el punto medio entre el sano disfrute y
el compromiso y la seriedad, de lo contrario se desatará el conflicto entre el
sentido del deber y disciplina y el deseo de querer gozar del placer
conllevando solo al resentimiento.
Paralelamente
Venus en Géminis hace otro contacto nada agradable con Neptuno, y siendo éste el
planeta focal de una configuración llamada T Cuadrada Mutable, provoca la bruma
o neblina que opaca la objetividad saturnina, generando caos, decepción y una
confusión e incapacidad para interpretar de manera clara y objetiva los
acontecimientos extraños que suelen suceder para estos días. El Amor y el
Interés se juntan y se van al Campo....pero cuidado, la neblina embriaga y engaña,
provocando la amarga y subsiguiente decepción.
Ast. Madelein
Méndez
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