El 22 de noviembre, la Luna y el Sol se
reúnen en el grado 0° de Sagitario, para marcar un verdadero inicio de un nuevo
ciclo. Acompañados por la energía de Júpiter, su gran benefactor que inyecta y
matiza este comienzo con optimismo, alegría y hace de cualquier emprendimiento
una actividad que seguramente irá germinando y creciendo con auto-confianza y
fe en el futuro, con la convicción de que de un momento a otro nos va a sonreír
la suerte o la diosa Fortuna. Una energía que confiere la expresión vital y te
invade tanta fuerza incesante y trepidante.
El alto grado de idealismo que tiene la
Luna Nueva en Sagitario si es bien aprovechada, te puede llevar a apuntar altos
peldaños, empujándote a salir de la rutina y salir en busca de tus más
anhelados sueños; es un momento apropiado para que reflexiones sobre algún
proyecto o te sumerjas en un proceso; tiempo de introspección y despertares
pero con el aditivo de poseer un inexplicable optimismo y confianza de que
obtendrás de manera certera el éxito. Después de la transformadora y pasional
energía arácnida, se aquietan las aguas para dar paso a la diversión, la
aventura, los viajes, el comienzo de algún estudio superior, las excursiones al
aire libre, son algunas de las actividades que están favorecidas. Todo lo que
emprendamos o comencemos en esta simpática luna, podremos recoger los resultados
15 días después en Luna Llena.
Comencemos un nuevo ciclo lleno de confianza por la vida, con una
visión clara, capaz de alcanzar un lugar
más allá de donde nacen las estrellas, ahí donde nacen nuestros sueños, ve por
ellos, Zeus te acompaña con su bondad y abundancia. Madelein Méndez-
Astromadesoterica.
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