La Luna va rumbo a formar
el Plenilunio; previamente se llena de sensualidad, ternura y erotismo; en su
posición de exaltación tiene la particular habilidad para que durante su
influencia, puedas conseguir ciertas cosas. Una energía de tierra de cualidad
fija que le encanta estar en terreno firme y defenderse contra las innovaciones
sorpresivas y los riesgos incalculables.
Fácilmente durante estos
días podemos visualizarnos y pensar de manera concreta bajo una orientación
practica; existe bajo su influjo un delicioso estímulo de lo familiar y sólido
y hay una marcada necesidad de estar físicamente cerca de tu pareja: sentir,
probar y disfrutar de la otra persona; el preámbulo de una mirada, de una
caricia, de saborear, palpar, oler y disfrutar de todo lo tangible a nuestros
sentidos.
Soy paciente, soy
persistente, con esta Luna permítete plasmar; esta energía de tierra nos trae
aquí y ahora con la necesidad de materializar, de convertir en realidad sueños
que verdaderamente podamos palpar, que se puedan manifestar, tocar, sentir,
oler y escuchar, no es momento de ponerse a dudar, es momento de ponerse a
trabajar, saboreando mi camino con confianza en mi destino!
Namaste.
Ast. Madelein Méndez
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